Halitosis - ¿Cómo abordar el problema con mis pacientes?
La halitosis (mal aliento) es un tema delicado y muy personal que muchos profesionales pueden no abordar por temor al enfado. ¿Cómo podemos ayudar mejor a los pacientes que sufren de halitosis? Más desafiante aún, ¿cómo podemos ayudar a los pacientes con halitosis severa y sin aparente autoconciencia?
Uso del lenguaje
Abordar la halitosis requiere valor y confianza en sí mismo. Hay cosas que puede hacer para que la conversación sea más fácil. En primer lugar, siempre informe a su paciente que está allí para ayudarlo. Su elección del lenguaje también puede influir en cómo se percibe la conversación. Pequeños trucos retóricos pueden ayudar a hacer su discusión más agradable. Hable en primera persona y no generalice ("tengo la impresión... me parece..."). Esto hace que la conversación sea más personal y le da al paciente la oportunidad de expresar su opinión sobre el tema. Hable en subjuntivo ("podría ser ..., sería posible ...") y use palabras como "tal vez" para que las declaraciones se suavicen y parezcan menos duras.
Abrir la conversación
Una pregunta importante es, ¿quién aborda el tema primero; el dentista, el higienista o el paciente?
- Por supuesto, es más fácil si el paciente plantea primero este tema tan delicado. Si el impulso proviene del paciente, hay muy poco peligro de ofender a nadie.
- El tema de la halitosis también se puede integrar en los formularios del historial del paciente. Esto le da al paciente la oportunidad de evaluarse a sí mismo. Si sospecha que tiene mal aliento, puede mencionarlo durante la consulta.
- Otra opción es que el especialista en salud bucal aborde el problema directamente. Es posible que desee ofrecer una consulta de halitosis por separado, independientemente de la revisión dental. Concertar una cita separada le dará tiempo suficiente para discutir este asunto personal y también establecerá las expectativas adecuadas para el paciente. Antes de la consulta de halitosis, es posible que desee pedir al paciente que complete un cuestionario, con el fin de enmarcar mejor el problema.
Hacer sentir cómodo al paciente
A continuación se presentan algunas recomendaciones para ayudar al paciente a sentirse cómodo mientras habla sobre su problema.
- Coloque la silla de tratamiento en posición vertical para que la conversación tenga lugar "a nivel de los ojos". Esto hace que sea más fácil generar confianza y hablar abiertamente sobre problemas íntimos.
- Asegúrese de que la conversación pueda tener lugar sin perturbaciones de las actividades de fondo o de ruido.
- Considere comenzar con una medición instrumental antes de pasar a la medición organoléptica subjetiva. Esto proporciona resultados tangibles que el paciente puede entender ya que se miden objetivamente.
- Es posible que desee iniciar la conversación discutiendo la prevención de un problema mayor, colocando la solución firmemente en las manos del paciente. Este enfoque se basa en la amplia experiencia de una higienista dental descrito en la revista “Higienista dental registrado” (RDH) [1]. Si la higienista notaba un olor al aliento, le decía al paciente algo como: "John, mientras estoy raspando esta área de tu boca, noto un olor. Mi preocupación es que esto podría afectar tu aliento en general. Aquí tienes algunas sugerencias que puedes intentar para ayudar a prevenir un problema mayor". Luego hablaba sobre el raspado de la lengua, la higiene eficaz, los enjuagues bucales o cualquier otra cosa que considerara apropiada para las necesidades del paciente. Al paciente se le decía con delicadeza que el problema era incipiente y que podía manejarlo para evitar que se agrandara. Por lo tanto, el higienista evita la vergüenza del paciente sugiriendo un tratamiento temprano.
Consejos y trucos para pacientes con periodontitis y boca seca
Tanto para los pacientes con periodontitis como para los de boca seca, es posible que desee analizar desde el principio la posibilidad de que se produzca la halitosis. Puede tranquilizar a los pacientes (o alertarlos, si es necesario) de que la prevención es siempre el mejor camino.
Si el paciente tiene problemas periodontales y no ha seguido el tratamiento, hablar sobre la inflamación, la infección y el efecto en la respiración puede ser un motivador poderoso. Explique a sus pacientes que es necesario abordar la fuente del problema y que nada enmascarará o cubrirá perfectamente el olor de una verdadera infección.
Para los pacientes que sufren de sequedad bucal y malos olores que podrían ser causados por ciertos medicamentos, una opción es "señalar con el dedo" los medicamentos y formar equipo con su paciente para ayudarlos a resolver el problema. Encontrar los medicamentos y tratamientos médicos puede tener lugar durante una actualización del historial médico, incluso sin tener que abrir la boca del paciente. Con este enfoque, puede sugerir hipotéticamente que puede haber un problema por verificar, en lugar de reaccionar a una boca que ha sido explorada. Esto puede ser mejor recibido por los pacientes.
Resumen
Con el fin de garantizar tanto el éxito terapéutico como la satisfacción del paciente, es importante que los profesionales sanitarios aborden la halitosis de una manera segura y abierta. Haga que el paciente se sienta a gusto y hágale saber que el problema está bajo su control y es manejable. Cuando sea apropiado, fomente el cumplimiento del paciente subrayando la importancia de la prevención y el tratamiento temprano.
Por último, asegure a sus pacientes que la halitosis no es un caso aislado, sino una afección común que afecta al 30% de los pacientes o más [2]. Si está tomando medidas, aclare que la medición de la halitosis se realiza a través de un procedimiento claramente estandarizado.